Yajaira es una joven con carácter, sueños y visionaria de 24 años. Creció en el cantón Pedernales en una comunidad muy cerca del mar, donde disfrutaba de la naturaleza, pero al mismo tiempo era testigo de las necesidades de las personas a su alrededor. En su comunidad hacían falta servicios básicos como alumbrado público, agua potable y alcantarillado.

Ella creció en un hogar de padres separados, cuando tan solo tenía cuatro años su mamá y papá tomaron vidas diferentes, pero recalca que, aunque hubo una separación, su padre Pablo siempre la educó con amor. Él se dedicaba a la agricultura y recuerda que le brindó confianza para hablar sobre sexualidad e igualdad de género. Yajaira resalta que la manera como le crió su padre ha sido clave en su vida. A su vez, ella cuenta que su madre, llamada Narcisa, ha sido un ejemplo a seguir, porque con su fuerza sacó adelante a sus hijos y logró tener su negocio de costura.

Como muchas personas, Yajaira a lo largo de su vida se ha enfrentado con adversidades. Ella comenta que en momentos difíciles es cuando ha ganado más confianza en ella misma. Los problemas familiares, la muerte de su hermano, la separación de sus padres, vivir el epicentro de un terremoto en Pedernales, las dificultades financieras para ingresar a la universidad son varias de las situaciones que ha superado y que ella asegura la han forjado como una mujer fuerte y resiliente.

Ella es la primera persona en su familia en tener educación universitaria. Actualmente, estudia el segundo semestre de la carrera de teatro con la convicción de seguir formándose, y de ser un ejemplo y lideresa en su comunidad y a la vez apoyar económicamente a su familia.

Yajaira forma parte del programa de becas de educación superior de Plan International, ha logrado permanecer en el sistema educativo formal para mejorar sus condiciones de vida y para tener más oportunidades. Así mismo, el equipo técnico de la organización acompaña y sensibiliza a su familia para que la apoyen durante sus estudios.

Recuerda que a raíz del terremoto que sacudió a Ecuador en el 2016, ella conoció a Plan International, con el proyecto Retorno a la Alegría. Poco a poco se unieron a la organización más integrantes de su familia, sus dos hermanos menores, su mamá y papá.

Yajaira, reconoce que su familia ha sido tradicional y machista, aunque ha tenido un padre amoroso y abierto. Para su familia, el hombre es el proveedor y la mujer cuida el hogar, cocina, lava y cuida a los niños o niñas. En sus recuerdos está la frase que escuchaba a menudo “aprende a cocinar para que no te pongan el ojo morado”. A pesar de que en ese momento ella no conocía sobre la igualdad de género, esas palabras le molestaban y le hacían reflexionar sobre su vida y la de sus seres queridos.

Por tal motivo, cree que el empoderamiento y liderazgo femenino son herramientas claves para el desarrollo de las comunidades. Solo así, se contribuirá a la reducción de los indicadores de matrimonios a temprana edad, embarazos en adolescentes y violencia basada en género.

Yajaira ha sido testigo de cómo sus amigas han limitado sus sueños por formar parte de esas estadísticas; con esos casos cercanos, ella ha aprendido a compartir sus aprendizajes con sus círculos más cercanos como en la familia, su universidad y su comunidad. En estos espacios, comparte conocimientos e información valiosa, que permiten reconocer una cultura de respeto hacia los derechos e igualdad de género.

Remarca la importancia y la confianza que debemos tener en el trabajo colectivo para desarrollar estrategias articuladas entre comunidad, ONGs, fundaciones e instituciones públicas y privadas que beneficien a la sociedad, especialmente a los y las jóvenes.

“La vida puede ser muy difícil e injusta, pero debemos recordar que nuestros sueños nunca son demasiado grandes. Así como es importante nuestro cuerpo físico, también lo es nuestro cuerpo espiritual, saber que debemos seguir trabajando en nosotros mismos…estoy segura de seguir cada uno de mis sueños”, expresó Yajaira.

Autora: Josselyn Bazurto – Técnica de Sostenibilidad

Oficina Manabí